Bruno @ Mexico D.F.

martes, noviembre 21, 2006

Los Romanos llegan a México!

Gran fiesta de Romanos en México. La gran Paola organizó una fiesta en su casa nueva a la que fuimos invitados. Paola, aunque no quiera reconocerlo, es nuestra jefa (una de las jefas). Decidió decantarse por el tema de Romanos, y ahí estábamos todos los elementos en su casa vestidos con toga so similar (ver foto de Julio y Javi, espectacular guardia pretoriana). Hubo comida, mucha bebida...hasta vino! Gracias! Vino! :) Decidimos que el lema de la fiesta debía ser: "Ave César, los que van a beber, te saludan!"

*Esta es la GRAN Paola...una de mis jefas de la ofi :) Su apodo es "Paola Buena Onda" o "Paola triple A"

La fiesta fue muy divertida y luego fuimos a un garito llamado “Buá”, donde acabamos a las...demasiado tarde. Buen garito, algo “fresita” (pijo), y caro de la leche...salir en México es caro, que le vamos a hacer...

*Lamentable, pero cierto...había que hacer uso del arpa de Nerón (mi amigo Juan iba de Nerón total, jeje) Lo que tiene el de la derecha en las manos..."no se" lo que era...lalalala

viernes, noviembre 17, 2006

Yaxitlán y Bonampak


Ese penúltimo día de Chiapas!

Nuevamente...tour. Nos vinieron a buscar a las 6 de la mañana...nuestro amigo Fernando, “Fercho” para los amigos (el mote lo pusimos nosotros), o también conocido como el teclista de Camela (ver foto abajo, espectacular).

Este día tocaba visitar Yaxitlán y Bonampak, otras dos ciudades Mayas.

Antes de dirigirnos hacia allí hubo que ir al medio de la selva a recoger a gente, a dejar a otros...es impresionante como se pueden combinar de bien en la selva para traer y llevar a turistas de cualquier forma a cualquier sitio. Paramos en un “hotel” en medio de la selva para recoger a unos guiris. Bajamos del pedazo de Toyota (15 personas de capacidad) y veos que hay una jaula con un par de monos dentro. Nos acercamos Valentín y yo y dos gringas totales rubitas (y no bonitas, ejem). De esto que se acerca un mono a la verja y se queda quieto...una de las no bonitas pero rubitas se acerca, y el “joputa” del mono llega y la pega un agarrrrrrrronazo del pelo impresionante!. A esto que la guiri se pone a gritar y consigue zafarse de la pedazo de garra del mono. Espectacular. Valentín y yo nos empezamos a descojonar, pero claro, con algo de respeto porque la pobre gringa estaba alucinando.
Tras el pequeño altercado con el mamón del mono, nos dirijimos al “puerto” desde donde ibamos a agarrar la barcaza para ir a Yaxitlán. Esto estaba en el río Usumacinta, que durante muchos kilómetros divide Guatemala de México. Aquí emprendimos los 45 minutos de rigor entre dos países. Os puedo decir que estuve a aproximadamente 10 metros de Guatemala...una pena no haberla tocado para decir “he estado en otro país”, jejeje. Qué puedo decir del paisaje IMPRESIONANTE...realmente las fotos lo dicen todo.


Al llegar a Yaxitlán comenzó el verdadero tour con nuestro amigo Fercho de Camela. Comezó a contarnos todo tipo de historietas, nos puso verdes a los historiadores, antropólogos, de todo. Nadie tiene ni idea, todo se lo inventan. Pero él tenía teorías...y claro nos contó unas movidas que nos dejó flipados. Comenzó a mostrarnos jeroglíficos y cosas así y a contarnos que él veía uniones de los Mayas con África, con Asia, con Egipto, de todo. Claro, hay que imaginarse la cara de flipe que teníamos todos.

Dice que hay ciertos jeroglíficos en los que aparecen elefantes (y en América no hay elefantes), con lo cual dice que alguien se fue a dar un garbeo y volvió con la imagen de los elefantes y la plasmó...para gustos, los colores. También dice que había serpientes entrecruzadas estilo egipcio, dragones estilo Chino...vaya jaleo. Todos flipados.

Después del garbeo, otros 45 minutos de barquito de vuelta y a comer (incluído en el tour). No estuvo mal...comida “casera” batallera pero necesaria para llenar el “buche”. Después tocaba viaje a Bonampak, que estaba lejos (en Chiapas todo parece que esta muy lejos de el resto de cosas porque en las carreteras con tantas curvas hay que echarle horas....). Allí dimos otro garbeo y vimos los murales pintados, bastante interesantes, pero ciertamente mal conservados. Seguimos con las batallitas de Frencho de Carmela.

La verdad es que Frencho era un crack. Nosotros, sin ser cotillas ni nada, le habíamos estado preguntando todo el día por el tema de los Zapatistas, y todo ese jaleo típico de Chiapas. El se había limitado a decir de una forma bastante seca y sosa que “Los Zapatistas habían ayudado bastante a Chiapas, y que esto y aquello era gracias a ellos, etc.”. Al final del día, al acabar la visita a Bonampak y antes de meternos en la fragoneta nos dice “Venid un momento”. Vamos con él, y el colega de la vega...se desabrocha el pedazo de peluco que llevaba y PUMBA! TATUAJE con las iniciales E-Z-L-N. (Ejército Zapatita de Liberación Nacional). Cada letra metida en una estrellita, espectacular! Os puedo decir que fue un momento de SUBIDÓN tremendo. Vaya lío! El colega era un zapatista! Fantástico, de verdad.

Después de esto, vuelta al hogar, fotito con Fercho Camelero y hasta luego lucas.
*Fercho Camela en el medio. Llevaba hasta un machete el pitbulero este...vaya crack!


Tras una duchita y un poquito de visualización de partido de baloncesto NBA con Valentín, fuimos a cenar al mismo sitio de la noche anterior en el medio de la selva. Ahí pedimos pizzas, y nos dijeron “no nos quedan, ha venido mucha gente a cenar”. Total, que pedimos pasta, carne... lo que sea. A los 20 minutos, vemos que empiezan a sacar pizzas... “Disculpe joven (es asi como se llama a todo el mundo, camareros, taxistas...), veo que si tienen pizzas, porque nos dijo que no quedaban?” y me responde “Ah, lo siento, es que el cuate de la cocina hizo más masa sin decirnoslo”. Madre mía...os puedo jurar que parece que muchos mexicaners tienen horchata valenciana en las venas...tremendo.


Después de comernos las NO pizzas vimos un espectáculo de música en vivo y uno de fuegos...gente bailando con cadenas con fuegos, baras con fuegos y mucha percusión. Una de las actuaciones que más me ha gustado de mi vida, espectacular.

De ahí pasamos al lado y había un grupo de pinchi weys dando un concierto de yo que se que. Empezamos a pimplar, en medio de la selva, escuchando a un grupo de borrachos, con luna llena...bastante memorable, la verdad. Después de pimplar y oir los intentos de bromas del vocalista, preguntamos para ir a un garito en el beautiful (por decir algo) Palenque. Nos dijeron un sitio, agarramos un taxi y al jaleo.
Al llegar al garito casi nos da algo. Entramos y os juro que no he visto un sitio que me diese más miedo. Ni “Abierto hasta el Amanecer”, lo juro. Nada más entrar vamos a la barra a pedir algo. Decidimos ir a lo seguro y pedimos cerveza embotellada, que no se porque pero a mi me supo mala, debía de ser el ambiente. El caso es que nada más entrar y mientras me dirigía a la barra, me viene una panchita, se me pone delante y me dice “Hola guapo”, y yo mirando a las estrellas (que no había, jeje). A los 4,3 segundos de decirme eso, no tiene otra genial idea que alargar su mano y hacer “pling” (prefiero no especificar lo que tocó, pero que cada uno se haga una idea). Si, momento más incomodo de mi vida... creo que ya todos saben lo que hizo la pinchi mex. Increíble. Poco después se empezaron a dar de leches unas chicas (más altas tumbadas que de pié) y a una la rompieron una ceja...espectacular. Al poco rato ya nos fuimos, después de despegar a un mex que le estaba dando la chapa a Castillo y que no hacía más que ofrecerme su mano para un apretón...y eso que yo “era el novio de Castillo”, pero el tío pico y pala en mi cara, tremendo.

Con esto acabó el intensísimo día...que madre mía!!!

El domingo nos despertamos, agarramos un autobús que nos llevó a Villahermosa, en el Estado de Tabasco, donde pillamos nuestro vuelo al “dulce hogar”. El caso es que después de estar tan maravillosamente en la naturaleza, viendo monos y otras cosas...el DF fue duro de digerir.
Tremendo México.

*Pisando México...al fondo Guatemala

miércoles, noviembre 08, 2006

Agua Azul, Misol-Ha y Palenque

Después de dormir aproximadamente dos horas y media...tocaba el viaje a Palenque, pasando antes por las cataratas de Agua Azul y Misol-Ha.

Puede ser interesante destacar la ligera resaquilla que llevaba el grupo de 5 cracks: Valentín, Castillito, María, Julio y Bruno. Tras hora y media de curvas y más curvas, llegamos a una especie de casa donde se paraba a todos los turistas para desayunar. Vaya grandioso zumito de naranja maravilloso, acompañado de huevos, bollos, mermelada...lo que se quisiera. Bastante bueno.

Después tocaba otra media horita más de curvas y de ver selva pura y dura hasta llegar a las cataratas de AGUA AZUL. Aquí se encuentran unas cataratas bastante grandes, no muy altas, pero si muy rápidas con una cantidad considerable de agua en movimiento.
Aquí nos dimos un paseito fantástico de un par de horas. Estaba todo bastante bien puesto para los guiris como nosotros. Había una infinidad de puestecitos y cabañitas donde te vendían artesanía (toda era igual en cada puesto) y mucha comida, jugos, etc. Cabe destacar en la foto la fantástica imagen de ir por el medio de la selva y encontrate una cabañita con una máquina de cocacola...eso no tiene precio! Tras visitar la pura y dura selva cercana a estas cataratas, volvimos tranquilamente a la camioneta que nos había traído camino de las siguientes cataratas, las de Misol-Ha.

Otra vez media horita de furgoneta (esto de viajar por la selva es complicadillo, se podría decir). Y estas si que eran las típicas cataratas, super altas y con una belleza realmente indescriptible. María, Castillo y yo hicimos una incursión como los más chulitos del lugar para hacer la gracia de ir “por detrás” de la catarata...lo cual nos salió bastante mal, ya que nos calamos en aproximadamente 14 segundos y sin darnos cuenta!.
Como se puede ver en las fotos este lugar era realmente mágico, con demasiada gente, pero tranquilo y especial, si no tenemos en cuenta el tremendo ruido del agua. Tras tener suficiente agua encima y aventura de la buena, nos encaminamos nuevamente en la maravillosa furgoneta hacia Palenque. Esta es una de las más grandes ciudades de los Mayas. Se podría decir que el lugar es simplemente acogedor. La belleza de las pirámides y construcciones no tiene comparación. Todos los edificios estaban rodeados por selva, lo cual la hacía ser como una islita. Había varias cosas que llamaban mucho la atención. Primero la verticalidad de las casas, ya que ciertamente no hacían más que subir y bajar...eso si, en unos escalones para pitufos, ya que era imposible poner los pies completamente, con el peligro que esto tiene. Además, las preciosas pirámides tenían una inclinación peligrosísima!, sobre todo si mientras bajabas mirabas al bellísimo paisaje... No hubo percances al respecto, pero que peligro! Tras empaparnos de la cultura Maya, nos dirigimos a la ciudad “moderna” de Palenque, que según la guia que llevabamos era “Bochornosa”. Gran guía, y tenía TODA la razón. Espectacular, habíamos llegado al México PROFUNDO.
Palenque es una ciudad sin centro, sin plazas, sin iglesias...simplemente un montón de calles unidas, con cosas raras, con muchas tiendas, con mucho tráfico, con gente extraña, con mucho calor seco...por fin habíamos conocido el México profundo. En las fotos se puede ver perfectamente de lo que estoy hablando...todo lleno de cables, suciedad, tiendas cutres, carteles extraños...impresioannte.

Tras esto nos tomamos una cenita bastante interesante con un filetito de “res” en medio de la selva, en una especie de complejo, y una vez llenado el estómago, era la hora de dormir...que todavía arrastrábamos algo de resaca del día anterior...

martes, noviembre 07, 2006

San Cristobal de las Casas y pueblos indígenas

Nunca me podría haber esperado lo que nos iba a deparar el segundo día!

Contratamos una excursión a “Los Pueblos Indígenas”. Lo primero que nos dijeron es “Ni se os ocurra sacar la cámara de fotos. Hace un mes, vino un israelita, e hizo una foto en la iglesia y directamente le metieron en la cárcel, además de romperle la cámara, etc.”. Lamentablemente esa es la razón por la cual no hay reportaje gráfico de lo que vimos.

Inicialmente fuimos a San Juan Chamula, y ahí realmente flipamos en colores. Era el “Día de los Muertos”, y para los indígenas es MUY importante. Todos van al cementerio (parcela de tierra en medio del pueblo, que ni está vallada ni nada de nada), y ahí llevan cosas a los muertos, los cuales todos están llenos de restos de pinos: Espectacular. Ahí van a pasar el día, al lado de las tumbas, mientras se ponen a pimplar como unos verdaderos campeones. ¡Vaya trozo llevaban algunos! Se podría decir que hacían “Botellón” en las tumbas, literal.

Tras la fantástica experiencia (realmente casi indescriptible), fuimos a la zona de artesanía, donde adquirimos alguna cosa típica. Por cierto, los indígenas son unos cracks, negocian más que los marroquíes! Vaya figuras.

Tras dejarnos unos cuantos pesos, fuimos a la famosa iglesia del pueblo, la cual, personalmente, no me llamó tantísimo la atención. A la salida estaban tocando las campanas (había un grupo de personas enfrente de la iglesia, a aproximadamente 25 metros con cuerdas que estaban unidas a las campanas...a eso le llaman ellos tocar las campanas). Lo impresionante es que había MUCHAS personas justo a la entrada, debajo de las campanas, BUSCANDO ORO! Ellos decían, que con el coche de las campanas, caían pequeñísimas partículas al suelo, por lo cual querían recogerlo. Sinceramente genial.

Después de San Juan Chamula, fuimos a otro pueblo, donde nos recibieron en una casa. Era una casa de artesanas, donde vivían varias mujeres. Nos dejaron muy clarito que los hombres a trabajar fuera y ellas a cuidar de la casa y a hacer la artesanía.

Fue nada más llegar cuando nuestro guía tubo la fantástica idea de hacer una BODA INDÍGENA con nosotros 4. Valentín y María se casaban, y Castillo y yo eramos los padrinos. La foto lo dice todo.


Para celebrar la boda, pasamos a su “cocina”, donde nos cocinaron unas tortas de maíz que tomamos con aguacates, frijoles, salsa...muy típico. Vaya cocina, madre mía. Una vez acabada la boda y el banquete, adquirimos algo de artesanía (una manta, una camisa, etc...insisto, como negocian, vaya cracks), y volvimos al pueblo. Vaya mañanita.

Por la tarde conocimos “a fondo” San Cristóbal de las Casas. Es un pueblo realmente precioso, colonial y limpio, pero lo que más me llamó la atención fue el colorido de las casas, precioso, impresionante! Fuimos a la zona “comercial”, y vimos alguna otra cosa interesante. Había un menda lerenda que tenía un peso en medio de la calle, y te cobraba por pesarte...espectacular. Nuevamente nos cautivaron los puestos de un mercadillo, donde pasamos una hora larga negociando y trapicheando. A mi me entraron los siete males y aunque todo sea tan barato, me compré tantas cosas que finalmente me deje una buena lana. ¿Para que está el dinero si no para eso?

Por la noche cenamos y nos tomamos unas cuantas copas y se agregó Julio, un auténtico crack que está en México con el ICEX preparando el Foro de Inversiones Hispano-Mexicano. Encontramos un garito donde había un concierto de Reggae espectacular, y finalmente nos dieron casi las 3....y teníamos la excursión del día siguiente a las 6...iba a ser un día muy largo!

*El gran Julio, Castis y Bruno in action (sin alcohol...)

Llegando a Chiapas

Que bonito es Chiapas. Eso si, nada más bajarnos del avión...vaya calor húmedo! Tremendo. Nada más llegar fuimos al “Cañón del Sumidero”, que está cerca de Tuxla Gutiérrez y Chiapa del Corzo. Ciertamente preguntamos por ir a San Cristóbal de las Casas primero, pero el taxista había oído por su radio que “San Cristóbal estaba cortado, porque había una manifestación Zapatista...”. Sin comentarios.

Al llegar al cañón del Sumidero, hicimos un tour de una hora en lancha rápida que nos mostró cosas impresionantes. El Cañón da la imagen al estado de Chiapas, y ciertamente es espectacular. Vimos cocodrilos y algunas formas indescriptibles. Como se puede ver en la foto vimos un “árbol de navidad” con cascada incluida. ¡Que bonita es la naturaleza!
Después d eso llegamos a una especie de zona natural, donde comimos y nos dimos un fantástico bañito en una piscina en medio de las montañas...¿qué más se puede pedir? Bueno...no hacía sol, eso era lo único malo. En este lugar vimos unos jaguares (en jaulas, que nadie se asuste).

Tras estas horitas en medio de la preciosa selva, volvimos al punto de partida, pasando otros 40 minutos en el agua en una lancha todavía más rápida (400 caballos de motor, una bestialidad).

Ahora llega lo divertido del día. Estuvimos preguntando para ver como podíamos llegar a San Cristóbal de las Casas. La respuesta fue “salir ahí fuera y pasará el autobús”. Después de esperar en una caseta medio derruida, conseguimos meternos en el autobús...eso si, no había asientos, asi que tocaron 2 horas de estar de pie. Todo era raro, realmente solo faltaban gallinas ahí dentro. Había uno transportando una tele, otro con maletas encima, otro... de todo. Lo divertido fue que subimos varios puertos raros en el bus y todos se pueden imaginar las curvas que hubo...dimos bastantes vueltas. Ahí empezamos a ver el Chiapas profundo. La gente no hablaba español...hablaban indígena! Evidentemente si hablaban español, pero no entre ellos...indescriptible idioma por cierto.

Tras llegar a San Cristóbal de las Casas visitamos un par de Posadas y nos quedamos en “La Posada de la Media Luna”, bastante acogedora, y donde pagamos 7 euros por persona día; barato.
Gran primer día. * Momento mítico dentro del autobús (aquí se llama Camión)